martes, 21 de diciembre de 2010

En Pro del latín y el griego



En este
artículo quiero hacer mención a cómo latinistas y helenistas hemos soportado durante mucho tiempo de forma estoica ,igual que Leónidas en la batalla de las Termópilas,los continuos ataques que tachan a nuestras asignaturas y nuestra dedicación docente de inútil o atrasada,¿quién no ha oído alguna vez aquello de que el latín y el griego son lenguas muertas? o aquello otro de ¿para que sirven estas lenguas hoy en día?
Algunos adultos consideran que los alumnos de secundaria se pasan el día declinando pero entonces, ¿un alumno de matemáticas se dedica a hacer cuentas todo el día? En definitiva lo que quiero decir es que no se puede considerar al latín como un único ejercicio de declinar al igual que las matemáticas no consisten sólo en operar ni el dibujo artístico sólo en pintar o colorear.

Se tiende a juzgar al latín y al griego como dos áreas inútiles de la educación secundaria sin saber que detrás de la solución de un ejercicio de traducción o retroversión se esconden complejos razonamientos sintácticos, morfológicos o léxicos y en griego también fonéticos pero además para la resolución de ese ejercicio se necesita de ciertos conocimientos culturales e históricos.

Obviamente nadie nos va a pedir por la calle que traduzcamos una frase latina o griega ¿o sí? pero las destrezas que se aprenden son igualmente válidas que en otras áreas. Los docentes utilizamos siempre ejemplos, paradigmas y herramientas para impulsar a nuestros alumnos y alumnas en el desarrollo de esas destrezas que se han considerados útiles para su formación como hombres y mujeres de provecho.

La vehemencia de este texto se explica por el amor que desde aquí sentimos los profesionales de clásicas por todo el mundo grecorromano, desde su origen hasta sus pervivencias en el mundo de hoy, pero pretendo mostrar que en algunas ocasiones nos sentimos insultados y, desde luego, indefensos, ante la administración y ante algunos que no se dan cuenta que si avanzamos sólo mirando al frente como animales de carga, nos podemos despeñar por los lados. El ser humano completo estudia en 360º.

¿Cómo puede nadie menospreciar a las lenguas clásicas o decir que para qué sirven, que son lenguas muertas si nuestra propia lengua ha heredado infinidad de términos provenientes de ellas? Para entender nuestra lengua primero hemos de entender la lengua madre de la cual procede. Muchos profesores de secundaria,entre los que me cuento,hacemos referencias en nuestras clases,día a día,entre nuestra lengua,el castellano y el parentesco de esta con otras lenguas.Es asombroso ver la relación entre distintas lenguas entre las que aparentemente,a primera vista,no parezca que exista relación alguna pero si nos fijamos en la siguiente imagen vemos que esas relaciones son explicadas desde el punto de vista de que muchas de estas lenguas proceden de una lengua común o madre que es el indoeuropeo.

Todas estas relaciones fueron estudiadas en el siglo XIX por los llamados neogramáticos (junggrammatiker jóvenes gramáticos en su mayoría alemanes),los cuales se encargaron de estudiar los parentescos fonéticos entre distintas lenguas tratando de establecer leyes fonéticas.Entre ellos se encuentran lingüistas como Schleicher,H.Osthoff,K.Brugmann.



Son varios los blogs que proclaman que el latín no está muerto. Recientemente acabo de descubrir otro nuevo blog
http://montxo-laboromniavincit.blogspot.com/ que cita textualmente:

"Ningún hombre o mujer lo es completamente si no conoce sus raíces. En los orígenes, en el pasado, está la clave de "por qué somos como somos".
Este blog quiere contribuir a que la asignatura de Latín se convierta en algo vivo, algo que importe, algo que nos haga ver de dónde venimos, lingüística y culturalmente."